No pudo ser, en la tarde de ayer el Arrayán volvió a caer una vez más ante su "bestia negra" de las últimas temporadas: un AMA con maneras de DH"B" que, si bien, no puedo decantar el encuentro de su bando hasta el último cuarto, cuando la expulsión del visitante Ramírez y sus tres faltas técnicas desequilibraron la balanza en favor de los madrileños. Los granadinos, ademas, notaron las bajas de Beiro, Rejón y Aguilera.
El encuentro comenzó con un Arrayán enchufado: la falta de claridad de los primeros minutos por parte del cuadro local fue aprovechada por los hombres entrenados ayer por Callejas para contrarrestar con rápidos contragolpes que casi siempre finalizaban en canasta fácil. Así se llegó a un parcial de 0-10 para los visitantes, circunstancia que no pasó desapercibida por parte del entrenador local Verdura, que rápidamente incluyó en su cinco a sus jugadores más determinantes y menos asiduos del resto de encuentros ligueros para imponer una presión asfixiante a la salida del balón de los granadinos que pronto se convirtió en una presión en toda la cancha aprovechando su mayor profundidad de banquillo y la rapidez de alguno de sus hombres.
A pesar de ello, el Arrayán pudo sobreponerse relativamente bien y llegó al descanso con un marcador de dos puntos favorables para sus intereses que aguantó hasta bien entrado el último y decisivo cuarto. Eran minutos en el que ninguno de los dos equipos anotaba con facilidad y la presión por la constante igualdad se hacía palpable en el ambiente. Sin embargo, poco antes de la mitad del cuarto, se produjo el incidente que desequilibró el choque: como decíamos antes, el jugador granadino Ramírez cometió su quinta falta personal y acto seguido la emprendió con los árbitros, que no tuvieron más remedio que expulsarle y señalarle hasta tres faltas técnicas, cometiendo un total de nada menos que ocho faltas en sus poco más de treinta minutos sobre la cancha. Este incidente se tradujo en un montante de diez tiros libres y posesión para el AMA, que tuvieron a bien aprovechar el regalo para romper con la igualdad e irse en el electrónico, que ya nunca más volvió a estar igualado. A partir de ahí, los intentos del Arrayán de reducir distancias fueron en vano y propiciaron que su rival aumentara su distancia en un nefasto cuatro que terminó con un clarificador 36 a 12.
Con este marcador, que no reflejó la igualdad existente entre los dos conjuntos durante más de tres cuartos del partido, el Arrayán suma la segunda derrota de la temporada, producida, además, ante el mismo rival en un partido en el que no se jugaba nada, ya que las sanciones federativas impuestas a los andaluces imposibilitan las posibilidades de ascenso de los granadinos esta temporada. Lo más positivo de la tarde de ayer fue el buen juego de los dos tres cuartos y buena parte del cuarto por parte de los granadinos, así como el debut de Carrión con la camiseta del Arrayán, que pese a su juventud y a llevar tan sólo una semana entrenando con el resto del equipo, aportó ideas y mostró maneras de buen jugador.
Por parte del Arrayán jugaron: Carrión (8), Ayllón (16), Ramírez (7), Torres (10), Mameko (6) -cinco inicial- García (2) y Molina (4).
Parciales: 11-17, 25-27, 34-37 y 70-49.
No hay comentarios:
Publicar un comentario